Será por lo de las expectativas y las percepciones, pero la verdad es que cuando vi la botella de Ossian en la tienda lo primero que pensé fue que se trataba de otro «nuevo vino caro en botella gorda». Y, la verdad, es que cumple con varios de los adjetivos, pues es nuevo y viene en botella gorda. Que sea caro o no lo dejo en el aire, porque los algo más de quince euros que cuesta este vino pueden ser mucho para los acostumbrados a los Rueda de cinco euros y poco para los aficionados al Borgoña.
Para ser un vino blanco español, la realidad es que es atípico. Y eso, me parece, es bueno, porque en el panorama patrio los buenos vinos blancos se cuentan con los dedos de una mano. Fermentado en barrica, tiene una densidad y una cremosidad infrecuentes por estas latitudes que lo hacen apropiado para platos con salsas trabadas. Carece de esa tropicalidad (plátano, piña, maracuyá) frecuentemente excesiva de los vinos de Rueda y, a cambio, ofrece notas complejas de fruta blanca madura, madera de calidad y toques amargosos que le añaden interés. El alcohol, nada menos que un 14,5% está bien integrado y compensado con una acidez suficiente, que hace que puedas beberte una botella entre dos personas con facilidad (así lo hicimos nosotros, acompañando a un pollo de corral asado y acompañado de una salsa de mostaza).
La presentación es original, con una botella que hace pensar en un tinto, lo cual es gracioso pues este vino blanco no es un blanco ligerito, sino que es perfecto para tomar en situaciones en las que, normalmente, pediríamos un tinto. Pruébenlo con una paletilla de lechazo.
pisto
No hay feedback porque no has mencionado al sanluqueño mágico.
Tienes razón en lo de los vinos blancos españoles, pero poco a poco van saliendo cosas nuevas muy interesantes. A mi me gusta consumirlos durante todo el año, pero hay quien solo lo hace en verano, pero sobre todo sigue estando muy arraigado eso del mejor vino blanco es un tinto y me da lastima por esas mentes que opinan sin probar y sin conocer. Ya irán entrando y cambiando su punto de vista.
Yo probé este Ossian antes de que saliera al mercado y me desconcertó un poco, seguro que en cuanto se dome en botella e integre la madera va a estar muy bueno.
¿Sabeis si Zacagnini ha abandonado Aalto definitivamente y ahora solo se dedica a este?
La aversión a los blancos en nuestro país es debida, en mi opinión, a que España no es un gran país para vinos blancos y a que los blancos extranjeros de calidad (no necesariamente los caros) no han llegado en el pasado. Consecuencia, supongo, de ser uno de los mayores países productores de vino.
Pero cuando te adentras en el maravilloso mundo del Riesling alemán, de las denominaciones menores de Borgoña, de los Chenines del Loira o de los Gruner Veltliner austriacos, te das cuenta de que te has perdido una parte de la historia MUY interesante.
Ojo, a mí me maravillan unos pocos vinos blancos españoles, pero a eso le voy a dedicar una anotación proximamente. Y eso que no parece que lo vinícola tenga mucha acogida en el blog.
pisto.
por cierto, nopisto, del presente laboral de Zacagnini no te puedo hablar, porque no tengo ni idea.
En Canarias se da una situación cuasisurrealista que es que a las mujeres modernillas les va el tinto como reacción al tópico de mujeres+blanco, y a las mujeres (no sé cómo llamarlo sin que se me caiga el mundo encima) «no-modernillas» les va el tinto porque no conocieron más blancos que los oxidados, sucios, y fermentados a altísimas temperaturas del pasado reciente. En medio, qué duda cabe, tiene mucho éxito el blanco semidulce mal llamado semiseco, de variedades locales tocadas de moscatel, pero un albariño, un rueda, o incluso un riesling suelen ser considerados «ácidos». Para arrasar en una mesa lo recomendable no es lo gastronómicamente correcto, sino por el contrario algo más «fofo» como pueda ser un gewürztraminer del Somontano. Y eso, por bueno que esté, es una pena.
Pues a mí, aún reconociendo que los franceses o alemanes son superiores y nos llevan mucha ventaja, sí que me gustan bastantes blancos españoles de esos de nuevo cuño. Quizá algunos (o muchos) están pasados de madera pero en general me parecen satisfactorios.
Eso de que el mejor blanco es un tinto lo siguen pensando una mayoría y sólo unos pocos se atreven a reconocerlo públicamente. En fin… para gustos. Personalmente, cada vez tiendo a pedir más blancos que tintos en los restaurantes; suelen ser mucho más versátiles que los tintos para determinados tipos de comida.
A ver si pillo una botella de ese Ossian.
Y hablando de vinos blancos patrios ¿Habéis vuelto a probar el Zarate Palomar 2004?
No, pero el otro día probé el del 2003 y era de llorar de bueno. Me han dicho que embotellan unos magnum…
No os perdáis el La Val f.b… el del 2001 es algo diferente.
Gracias por vuestros comentarios sobre el OSSIAN 2005. Me alegro que os haya gustado.
En cuanto a mis «actividades» con mucho gusto os diré que no me he desvinculado de AALTO, al contrario, es y sigue siendo mi principal proyecto y actividad. Es que un dia me di cuenta -con horror!- de que no sabia nada de vinso blancos y pensé que la mejor manera de aprender, ademas de catar mucho, es hacer uno.
Bienvenido Javier,
Me alegra ver que sigues en Aalto.
Esperemos que este Ossian evolucione bien y se convierta en un blanco de referencia, que en España andamos muy escasos de grandes vinos blancos.
Enhorabuena Javier , quien es capza de hacer un tinto como el Aalto,no es extraño que haga un blanco como el Ossian,David Ormaetxea y yo Jose Angel Bazán ambos miembros de LA CASA DE LUCULO DE SAN SEBASTIAN estamos eentisiasmados con el
Gracias por las felicitaciones, pero sin falsa modestia tengo que deciros que ni el AALTO ni el OSSIAN los hago yo, sino los enologos, que son quienes merecen las felicitaciones. AALTO se debe a la maestria y a la inigualable experiencia -36 años elaborando en Ribera del Duero a alto nivel_ de Mariano Garcia, y OSSIAN es la obre de un genial enologo francés, Pierre Millemann, que ha sabido entender las posibilidades de la Verdejo sin haber antes elaborado esa variedad ni siquiera haber oido hablar de ella. ES que los de Borgoña en blancos saben más que nadie!
Anoche , invité a unos amigos a casa a cenar y ver el eclipse .
El menú consistió en una crema fina de calabaza y unos lomos de bacalao caramelizado con aceite de piquillos sobre lecho de patatas de la abuela …… Y al final de lo que hablamos aparte del eclipse fué del vino , la verdad es que es un grandísimo blanco y que si no te dicen que es verddejo lo situaría en la ribera del Loira (¿¿¿Chenin…???) , las maderas de crianza son magníficas , compraré un par de botellas más para dejarlas a la sombra y recatarlas más adelante ( 2-3 años ) .
Gracias a Javier Zaccagnini y a Pierre MIlleman por esta elaboración .
El único pero es quizás el precio algo alto .
Saludines
Jose