Si se tiene la suerte de que el suegro te regale un calabacín de dos kilos, se cortan ocho rodajas de unos tres milímetros. Si no tenemos esa suerte, será cosa de cortar unos calabacines a lo largo, con ese mismo grosor.
Calentaremos el horno a 130ºC y pondremos el calabacín en una placa de horno ligeramente engrasada. En diez minutos el calabacín habrá perdido buena parte del agua. No es necesario que tueste. Reservaremos.
Cortaremos rodajas (también de unos 3mm) de un buen tomate (añadiendo un poco de sal) y repetiremos el procedimiento. Reservaremos.
Ahora montaremos el milhojas de forma que cada uno tenga cuatro capas de calabacín y cuatro de tomate (o seis, u ocho de cada), e intercalaremos una o dos lonchas de un queso que funda bien (presumo que sería delicioso con una mozzarella fresca) rematando el milhojas con una última capa de queso. Alguna capa de un buen jamón tampoco le cae mal, claro. 10 minutos más de horno, terminando con el gratinador, y a comer.
El paso previo de las verduras por el horno es imprescindible para quitarles el agua porque de lo contrario el milhojas se agua, se desmonta y pierde el encanto. He tenido un par de fracasos por el camino por este motivo.
Está muy bueno con el rosado de Prieto Picudo «Charco Las Ánimas» 2007 de Raúl Pérez o, en su defecto, con cualquiera de los grandes rosados del país.
Qué buena pinta y parece sencillo no?
Soy una fan de los milhojas del tipo que sean!
Aupa!
Interesante esta versión con calabacin. Nosotros hacemos uno muy parecido con berenjena, que también horneamos unos diez minutos sola, con un chorrito de aceite.
Y efectivament la mozarella de búfala és brutal!!! Y lo del jamon, un buen prosciutto di Parma… mmmmmmmmm
Delicioso, yo lo preparo siempre y también con berenjenas, haciendolos primero a la plancha , una pasada, o al horno, me encanta!!
Saludos
una pinta buenísima , rápido y sencillo,sólo una duda , el calabacín tan grande no estaba un poco duro’?? digo si no tenia semillas , porque nosotros los grandotes los despreciamos precisamente porqué resultan duros.
Mañana comemos tu milhojas si me permites el robo …..ah! comienzo a apuntarme esos vinitos en la agenda compras.
SALUD
En efecto, el calabacín tenía unas pepitas considerables, que quité como pude. En este caso hay que tener en cuenta que el producto me llevó al plato y no viceversa.
Salud,
pisto
Te cogí prestada la receta y la hice el sabado.
A mi mujer le encantó.
Para la proxima en vez de queso emmental (el que tenía en la nevera)le pongo Havarti de barra o Castellano tierno(o mahón semi).
Le puse una buena loncha de jamón de trevelez,el plato resultó exquisito…
Mil gracias!.
alex,
en efecto, el emmental se me antoja un poco fuerte para el plato. Un Castellano tierno le iría mucho mejor en mi opinión. Yo también usé lo que tenía por casa (que era una mozzarella de barra).
Me alegro de que saliera bien el plato, son mensajes como estos los que nos animan a publicar.
pisto
No sabía lo del horno a 130º para la humedad, tengo que probarlo a ver que tal me queda, por cierto, me gusta tu blog
Lo probé ayer con berenjena y el resultado estuvo bien pero el problema es que las finas rodajas de tomate, llenas de agujeros al irse la parte de las pepitas, se quedaban en nada tras hornear…
Ademas corté las lonchas de queso con un vaso para hacerlas iguales que la berenjena y el tomate, y viendo ahora otra vez tu foto es mejor que sobresalgan: queda más bonito y más jugoso al salir el queso.
Cuestión de irlo perfeccionando…
Cuando veo una receta con el queso fundido se me van los ojos, bueno y el paladar…y ésta tiene que estar especialmente buena.
Enhorabuena