La temporada de bonito del norte ya da sus últimos coletazos y ya no hay que madrugar para lograr buenos lomos en la pescadería. Aprovechándonos de la circunstancia, el viernes me hice con unos magníficos filetes de ventrisca, probablemente el bocado más suculento de este pescado (y el más caro), que preparamos a la plancha, como es habitual.
¿Qué hacer con un filetito que había guardado en la nevera? Lo corté en dados gruesos, lo pasé por huevo batido y luego le di un rebozado de kikos de la marca Mr.Corn (de Grefusa) que previamente había molido groseramente en el mortero. Luego lo freí en AOVE a una temperatura no muy alta (los kikos ya están fritos y se pueden requemar). Lo acompañé con dos partes de salsa de soja y una de miel. Crujiente, sabroso, sorprendente, fácil.
pisto.
hay que probarlo!
Genial lo de los kikos. Pero básico: los kikos han de ser Mr. Corn de Grefusa.
Yo hice un picadillo para una ensalada con kikos «de garrafa» y mi dentista financió su viaje a las Bahamas gracias mis múltiples caidas de empaste.
Muy imaginativo y, sin duda, muy bueno. Lo probaré.
¿y fuiste capaz de moler los kikos sin comértelos?….
Si intento hacer ese plato me hubiera zampado los kikos en crudo nada más oler el contenido de la bolsa.
🙂
fernando,
es cuestión de tener otro paquetito al lado, para ir picando 😉