Una pequeña excursión por la Gerona más profunda nos llevó, atravesando el Collsacabra -una preciosa y empinada ruta que antaño estuvo poblada por de bandoleros y que separa Vic de Olot- a Cantonigrós; un pequeño pueblo donde nuestro amigo Encantadísimo nos había recomendado parar a conocer y probar los embutidos que elaboraban en Can Colom. Un colmado singular, de esos llenos de embutidos colgando por todas partes y en los que parece que es imposible que quepa una longaniza más, donde Manel y Dolors llevan más de cincuenta años invitando a todo el que entra, y sin apenas mediar palabra, a probar un sinfín de embutidos tradicionales y artesanos que ellos mismos elaboran y venden: bull, butifarra, fuet, longaniza, chorizo y, sobre todo, la pilota asada (para morirse de gusto). Además de otros productos artesanos de la zona, entre ellos un indescriptible licor de queso.
Cuentan que el departamento de marketing de la universidad de Vic se desplazó hasta este pequeño comercio para estudiar sus técnicas de venta. Se ve que esto de dar a probar el género antes de venderlo no aparecía en sus sesudos manuales.
Su éxito ha sido tal que ahora mismo organizan cursos de elaboración de embutidos y hasta han montado un alojamiento rural en un local anexo.
Una de esas recomendaciones que se agradecen en el alma (y el estómago).
Can Colom
Carrer Major 28, 08569 Cantonigros (Vic)
Osona, Cataluña.
Tel +34 938 565 058
Por cierto, si estáis por la zona no dejéis de visitar Ca l’Ignasi, unos auténticos artistas de la cocina Slow Food.
¿Regalar el género?, ¡habráse visto!, ¡qué derroche! :-).
A ver si te explayas un poquito más en la descripción del producto, haragán.
Lo de ser agarrado ha dejado de ser catalán. Mira Adriá, que va a repartir gratis esferificaciones entre los domingueros pobres.
Martín Berasategui, asking for the tasting menu, is in a very good shape, I’m not that enthusiast asking a la carte.
Then ElKano or Kaia in Guetaria for a Turbot feast.
Mugaritz, after the reopening, seems to be better than ever.
Desde que has hecho el curso CEAC de inglés no hay quien te aguante.
Jeje, me he pasado el verano en un campamento Vaughan. Por cierto, no vayan, la comida es fatal.
Interesante lo de estos dos, seguro que merece la pena una visita, solo «por probar». Lo que me ha sorprendido muy gratamente es la web del amigo Ignasi: si las imágenes son fiel reflejo de la realidad un paseo hasta allí es hasta obligatorio, y mira que me pilla lejos.
Gracias Nopisto.
Pues mi familia y yo hemos estado este fin de semana, fuimos a comer a Ca l’Ignasi i todo perfecto,comimos de lujo,un servicio excelente y un entorno priviligiado.
También pasamos por Ca Colom y nos llevamos un par de cositas que …uuuummm!!!!
Qué maravilla de tiendecita… Si me quedase encerrada dentro una noche, creo que no pegaría ojo mirándolo y probñandolo todo… jejejejej
Un besote y decirte que tienes una maravillosa web