Aprovechando todo el revuelo que se ha montado con el tema del Santamaría de los huevos fritos, saco a colación otro asunto que me gusta discutir y del que también se ha hablado en otros blogs.
No se trata tanto de cuestionar el talento, ni seremos nosotros quienes digamos quién lo tiene o quién es un creador y quien no, eso se lo dejamos a los críticos, a los gourmets, los clientes en general o por qué no… A la historia de la gastronomía… Si no si entre los cocineros son realmente artistas o artesanos.
Hablando con un cocinero de los que pitan, este me contaba que para él era más importante un tío que tiene la mano de sacar 100 merluzas iguales todos los días que el que inventa el plato de merluza propiamente dicho. Aunque es este último el que se lleva los laureles.
Mi conclusión es que a tener la mano se aprende, pero para crear un plato hay que tener talento. Eso si, a la hora de ir a comer que esté el que saca todos los platos estupendos.
Otro amigo me comentaba:
Por supuesto creo que todo buen chef debería caracterizarse por saber formar un equipo y rodearse de la gente adecuada. Por ejemplo Ducasse ha llevado este modelo al extremo, formando en sus restaurantes a los futuros miembros de sus equipos de cocina, codificando las recetas al detalle para que puedan ser recreadas con precisión sin que él esté presente. Aquello de «Chef, ¿quién cocina cuando no está usted en el restaurantes?», respondido con un «El mismo que cuando estoy yo» bien podría aplicarse a Monsieur Ducasse.
A fin de cuentas creadores de verdad hay muy pocos, que son los que se llevan toda la fama y los ejecutores ninguna.
Debería haber gloria para todos.
Nopisto
Para ejecutar hay escuelas. Se trata de repetir y repetir.Pero para crear no hay escuelas.Nadie recuerda a quien copia cuadros con una perfección absoluta.
Es la conjunción de talento y técnica. El uno innato y la otra adquirida.
Hace falta talento y técnica, pero como en el arte no es lo mismo pintar un cuadro como velazquez o hacer una escultura como Miguel Angel y lo que muchos artistas presentan en Arco.
En la cocina es lo mismo y, como bien decís, la fama no se reparte por igual.
Rafael y Miguel Ángel también eran creadores de equipos, ellos supervisaban y daban su toque final en muchas de sus obras. Sin embargo, creo que la cocina no es lo mismo, y la prefiero como artre menor o artesanía. No debiera de ser tan difícil compaginar las dos cosas:saber inventar/evolucionar un plato, y cocinar con perfecte reiteración
Sin querer complicarle la vida a nadie porque encima les quiero muco a todos los que escriben y contribuyen a este espacio, tengo una pregunta bien intencionada: Estoy preparando un trabajop académico sobre la artesanía alimentaria y los productos caseros en una de nuestras comunidades autónomas y creo que personas como las que nos dejamos caer por aquí tenemos mucho que decir sobre el tema, por lo que me gustaría saber lo que piensan, sin deseo de monopolizar un espacio que no es mío y que ciertamente quiero preservar tal y como es porque creo que es una delicia. Muchas gracias
M5050, ¿Podrías concretar un poco más? es que sobre artesanía alimentaria se puede entender el trabajo de las monjitas con sus dulces, un cocinero con su equipo o cualquier conservera tradicional.
La idea parece intreresante, pero necesitaríamos unos parámetros más ajustados.
Aún no tengo la idea muy clara, estoy haciendo el trabajo previo y aprendiendo sobre el tema, pero, básicamente, me refiero a las leyes supuestamente ideadas para proteger al consumidor (calidad) y a los productores (precios) de alimentos. Creo que creo que está todo muy bien, pero no puedo dejar de desconfiar de la Administración, la que sea, y en este caso son las autonómicas las que andan echando mano para, dicen, proteger y promover sus productos de calidad, diferenciados, etc. Creo que creo (no sé nada) que la mejora de la vida de los pequeños productores, que lo pasan mal, depende de otras cosas que no tienen más que ver marginalmente con leyes. Por ejemplo ¿leemos los consumidores las etiquetas de envases, preguntamos en las verdulerías, fruterías, carnicerías, pescaderías, de dónde vienen los produsctos? ¿Favorecemos en la medida de lo posible los intereses próximos y ahorramos combustibles fósiles usados en el transporte a largas distancias? No estoy hablando de fundamentalismo, pero sí de ajustar la condusta consumidora a unos parámetros empatéticos, si se puede decir así, con una clase de gente, nuesetros vecinos y paisanos agricultores tradicionales y neo-rurales que quieren vivir a cuenta de algo que todos queremos disfrutar pero por lo quen parece que no siempre estamos dispuestos a pagar. Y entonces vienen las leyes a regular el fomento y la calidad bla-bla-bla. Muchas gracias.
Pues en este aspecto es muy interesante lo que nos contó Javier en un comentario de este post
También hace tiempo escribí un post sobre Mercados agrarios transparentes
Espero que te ayude.
Un saludo
Genial. Muchas gracias.