A diferencia de lo que ocurre en el Medoc, donde la clasificación de viñedos data de 1855 y prácticamente no ha sufrido variaciones en los últimos 150 años, la clasificación de viñedos de Saint Emilion se revisa cada diez años.
Como dice Jean-Luc Thunevin, estos cambios no tienen una gran importancia en cuanto al precio al que se venden los vinos en el mercado final (aunque Ausone y Cheval Blanc sean los más caros) pero sí en cuanto al precio de las parcelas.
El INAO ha hecho pública hoy la nueva clasificación de 2006 que se puede consultar aquí.
En breve, se puede decir que mantienen la máxima categoría (GCC-A) Ausone y Cheval Blanc, que se incorporan a la segunda categoría (GCC-B) Pavie-Macquin y Troplong-Mondot y que en la tercera categoría (GCC a secas) entran Bellefont-Belcier, Destieux, Fleur-Cardinale, Grand Corbin Despagne y Monbousquet, mientras se caen unos cuantos que sería demasiado prolijo enumerar. Si alguien desea comparar la disponible en la web de la INAO, aquí se puede comprobar la clasificación de 1996.
pisto
Vamos, que ascienden a Pavie. Parker 1 – Jancis 0
Muchas gracias por pasarnos esta información, hoy mismo. La desconocía y me acabo de mirar (con cierta precipitación) el listado. Además de lo que comentas, me alegra personalmente ver que Laniote se mantiene en el listado. Me parece que es uno de nos buenos ejemplos de tesón y calidad en una zona «enloquecida» por los precios y las valoraciones. Y la pareja que lo lleva es simpática y acogedora. Y aunque lo diga Thunevin, me temo que si alguno de estos más «humildes» saltara de la lista, se resentiría su comercialización.
Un saludo cordial.
Joan
Nopisto,
lo que habría sido llamativo es que hubiesen subido a Pavie «a secas» a GCC-A. En el foro de eRobertParker.com se especulaba días atrás con la subida a GCC-B de Pavie-Macquin y Pavie-Decesse, y sólo uno se ha producido. Victoria de Parker, pero no tan abultada como se pensaba.
Joan, estoy de acuerdo contigo en lo de las repercusiones en precios. Pero piensa que la clasificación GCC «sin más» son vinos que no tienen el caché de los de arriba. Vaya, que alguno te puedes encontrar en los diez o quince euros. Tampoco hay un gran margen hacia abajo.
pisto
Tienes toda la razón, Pisto. Los precios no tienen nada que ver entre las diferentes categorías y los GCC sin más están por ahí. La pregunta, por ejemplo, para Laniote, al que conozco bien en su salsa (explicando el producto y el proceso a 40 japoneses y colocando cajas y cajas!) es: si no pudiera poner en la etiqueta GCC, ¿vendería lo mismo? Probablemente no. De ahí, claro, el quebranto económico.
Salut!
Joan
No os olvidéis de de Montbousquet, que es también de la órbita Pavie. Por cierto, ¿alguien sabe de donde provienen las uvas de su Sauvignon Blanc?
Joan,
evidentemente, el dueño de una propiedad que es descendida de GCC a GC (hay más de 500) no debe estar muy contento. Pero, ¿crees que el mercado de estos vinos realmente conoce o le importan las diferencias entre ser GC y GCC? Lo digo porque muchos de esos vinos son vendidos en la gran distribución, donde las cosas puede que funcionen de forma diferente a lo que los locos por el vino llegamos a hacer por una determinada botella de vino.
Por ejemplo, uno de mis Saint-Emilion favoritos es Fombrauge, que no es siquiera GCC aunque tiene más calidad que muchos de los que sí lo son. Lo mismo ocurre con tantos garagistas. ¿Qué decir de Valandraud, del propio Thunevin?
Sí, claro, tienes razón en lo que comentas y el concepto de «vin de garage» lo que intenta es, precisamente, huir de la presión de clasificaciones inmutables o que cambian de tarde en tarde.
Yo me refería más bien a estas bodegas pequeñas (producción sobre las 70, 80 mil botellas) que viven, en parte (no sabría decirte el %) al amparo del renombre GCC. Tú eres un consumidor muy cualificado y el GCC no te importa mucho (como amí, sin duda): catamos y decidimos. Pero hay un montón de gente que se mueve por otros «impulsos» y para ellos, esa etiqueta tiene un valor. He tenido en varias ocasiones, la oportunidad de charlar en el Bordelais (en St.Émilion, en la bodega de Laniote y en la Maison de Graves…) con grupos de turistas «enológicos» no preparados y todos buscan la marca, el «relumbrón» de una clasificación.
Yo estoy muy de acuerdo contigo, pero quizás distinguiría en el tipo de consumidor, si es cualificado o no.
Saludos!